Pasaré de quien pasa de mi.
Olvidaré a quien quiere que me hunda.
No pensaré en los que me desearon mal alguno,
no discutiré con quien quiere que lo haga; es cierto, no soy buena en las discusiones.
Agacharé la cabeza cuando tenga que hacerlo; pues, ¿quién resiste mejor a la tormenta? ¿el roble o el junco?
Que pasaré del "Qué dirán".
En cambio, abriré los brazos a los que quieran ayuda.
Querré a los que me quieren,
cuidaré a los que me necesiten.
Apoyaré al que me apoyó y al que en mí confió.
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